La gastronomía es un componente de gran relevancia en la identidad y forma parte del patrimonio inmaterial de la humanidad y los recetarios son los documentos vivos de la evolución histórica de una sociedad.
No obstante, la atención se ha fijado siempre en aquellas recopilaciones impresas a lo largo de los siglos, en gran medida a manos de hombres encargados de la cocina para los ámbitos políticos y religioso, desatendiendo así lo que ha sido la aportación principal de la mujer a este patrimonio: los recetarios manuscritos domésticos.
En los últimos años el testimonio callado y tantas veces despreciado de estos recetarios ha comenzado a ser objeto de estudios. En este sentido hay que destacar la publicación en 2013 por la editorial Visor de el Libro de apuntaciones de guisos y dulces, un recetario fechado en torno al año 1740 y firmado por María Rosa Calvillo de Teruel, que recoge una selección de recetas manuscritas de carácter doméstico de gran valor histórico para entender los usos y costumbres culinarios en los hogares burgueses del siglo XVIII en Andalucía.
Siguiendo este ejemplo en diversas comunidades autónomas españolas se han empezado a realizar trabajos de búsqueda y catalogación de esta documentación que cada vez se pone en valor.

Este proyecto se proponer realizar un mapeo de los recetarios domésticos históricos en Canarias y su puesta en valor a través de un repositorio de acceso libre a través de la web mediante el que dar valor a la aportación de las mujeres en el patrimonio inmaterial de las Islas Canarias y además dar a conocer los elementos de patrimonio material como documentos y archivos en los que se encuentran estas recetas. Además, este proyecto incluye la investigación de la relación de Canarias con el exterior, ya que muchas de las recetas de las islas tienen su origen en recetas marineras portuguesas, andaluzas, extremeñas o gallegas.